martes, 28 de julio de 2015

Porque ninguna cadena será perpetua

                    a Laura Moyano, que toda la luz sea con vos

hombres mataron a sus mujeres
mujeres mataron a sus hombres
en mi familia
y todo ello en nombre del amor
desde los bordes de la ruina
-quiero mirarlos plenamente-
-no estoy aquí para juzgarlos-...
pero he venido de su guerra
por eso me hube constituido en víctima
por eso he sabido el odio
por eso broté el desprecio
por eso el ojo desigual con que he medido
a tantos hombres y mujeres
y tal el signo de lo trágico
y tan adentro del amor...
nada es casualidad
los elementos que producen adn son los mismos que componen las estrellas
y están contados los lunares los cabellos
y no se heredan las manos solamente...
nada es casual cuando todo es energía
y arrastramos de allá de los ancestros
y atraemos aquello que creemos
y atraemos aquello que juzgamos
ésta es la libertad
éste es el juego
ésta la responsabilidad y no la culpa
con fuerza de crear y de sanar
de devolver lo ajeno
de reintegrar las sombras en la luz
y obsequiar las reverencias al pasado
y luego caminar hacia lo propio
decir chau
decir hola
sumergirse en lo inmenso que se anhela...
por eso sahumamos esta pieza
por eso nos besamos las heridas
por eso amamantamos al horror
hasta calmarlo
hasta volverlo arrullo
por eso es que hoy hacemos el amor
para afirmar que todo es lo posible
y que si existe un límite es mental
y que urge deshacerlo y expandirse...
porque la voluntad es el coraje
y es hora de escoger a la alegría
el río ancho que alimenta seres
el río ancho que sustenta vida
porque tengo la conciencia de ser dios
y dios nosotros vos y ellos cada uno
yo quiero que la paz sea conmigo
yo quiero que la luz sea conmigo...
a la violencia agradezco esta bandera blanca
a la soberbia esta humildad que va naciendo
al espejo la imagen de mí misma...
puse en mi altar a hombres y mujeres
tomados de la mano y de la risa
en todos los paisajes y los tiempos...
qué feliz el destino que me espera
ver florecer al loto desde el fango
ver a la larva volverse mariposa
atender a los cambios de la sangre
respetar a los árboles que vibran
hacer revolución en mi persona...
qué feliz el destino que me espera
que toda la paz
sea conmigo

C.


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