miércoles, 24 de enero de 2018

Poema para una niña que duerme

escribo en presente
el silencio no es silencio
son pájaros
agua que baja entre las piedras
un motor pasando
una amorosa conversación de otras

yo no sé de qué se trata la vida
ni creo en dios porque no sé qué cosa es dios
pero me importa el origen
y la tierra sobre la que crezco
también me importan los caminos
por eso respeto los caminos
-con mis limitaciones de respeto-
aunque no los comprenda
pienso que hay algo que elige los caminos
una voluntad profunda
un corazón unido a lo que existe

escribo en presente

el silencio no es silencio

es agua fluyendo por su cauce

y más pájaros

C.

que nada nos libre
de la responsabilidad
de ir
hasta el amor

C.

viernes, 5 de enero de 2018

Relato de un sueño III

la impresión es la de estar perdida en el sueño
no sé en qué barrio
incluso pareciera otro lugar
una realidad paralela
que me inspira un alerta permanente
es de noche
tomo por un camino de tierra empinado y angosto
me bajo de la bici para pasar al lado de los perros
respuesta del miedo o el prejuicio
estoy entregada en la extrañeza
como tantas veces
y llego a donde las cosas pasan en la calle
afuera de un local los viejos juegan a las bochas
sigue siendo de noche
hay pibes que charlan
que pasan
que se quedan
algo se me hace familiar
hospitalario
entro a una casa precaria conocida
en su interior una pared celeste completada con parches de colores
veo a dos pibes ahí
me dirijo a uno
le pregunto algo
me da a entender que me tiene vista de otras veces
estoy preguntando para irme
me indica
me dice usted

hemos construido la distancia

C.

Por el mes de diciembre II

el hombre me vio renegando con los parantes de la primer ventana
y se acercó
me habló desde atrás para ayudar
le agradecí
sin ver
y le conté que a cotidiano reniego un poco con lo mismo
que ahora cuando ajuste se suelta el otro
y después los ato con alambre...
colaborando juntos quedó abierta
me di la vuelta para ver
le sonreí
y empecé a sacar las plantas
las estanterías
los cajones
y luego a renegar tranquila y sola
con los otros parantes
de las otras ventanas

el hombre se quedó cerca porque estaba cerca
a un metro y medio más o menos
en la misma vereda
parecía esperando no sé a quién
no me volvió a ayudar
pensé que habría comprendido que era parte del trabajo
este esfuerzo del cuerpo
o que su acción era poco significativa al fin y al cabo
como alcanzarle un ladrillo a un albañil
que va a manipular pilas y pilas
en fin
quise imaginar qué habría percibido
supuse irrealidades

a la hora terminé de armar
me acomodé
preparé el mate
lo perdí de vista
me olvidé
recibí a una amiga
vendí algo
se largó la lluvia
y otra vez el hombre
de pronto
al frente mío
guarecido del agua bajo un techo

ningún gesto resulta irrelevante

ni siquiera un parante de la primer ventana

cualquier dedicación su gentileza

nos miramos a los ojos

sonreímos

C.




miércoles, 3 de enero de 2018

Vivo

hay miedo acá nomás
violencia constatable
a todas las escalas
empezando por la familia propia
pequeña o extendida
el vínculo interpersonal
que es imposible  negar desconocer

la enfermedad se asienta en pensaderas enroscadas delirantes
en lógicas razones instruidas
que desatienden silencio corazón
liberar es un camino largo
que se inicia adentro
destapar
oxigenar
mover la tierra
para que pueda sembrarse la semilla de siempre
su novedad

el ser es más grande que "su" yo
la energía trasciende toda forma
hasta saber lo que se puede y lo que no
en lo de cada día
ofrendar (se)
paz

vivir en estado de intemperie
observar el cuerpo
respetar los ciclos
la abundancia


wichí

pueblo ancestral

gente que nombra

lo que tiene vida

C.