de la italia vino la bisabuela
sentí su dolor en mi cintura
su tristeza
su desarraigo hondo e imposible
sus ganas primeras de no ser acá
tal vez un niño en el vientre
tal vez sola
no sé
con las piernas duras
con los pies perdidos
en ese transitar hacia estos lados
la ví en mí que soy su sangre
oí los llantos de los suyos
consciente de no dar la vuelta atrás...
y luego
en algún lugar del infinito
del tiempo sin tiempo atravesable
por todas las mujeres que hemos sido
estamos siendo y seremos engendrando
la ví la fui mirando
ella y yo tornando nuestros ojos
a la madrecita que soltamos
y a la madrecita que vinimos
mamasa argentina que nos dio reparo
pa crecer de nuevo la esperanza
nos supe y éramos
ahora
dos mujeres despidiendo agradeciendo
reconociendo los dos suelos las dos patrias
estirando las raíces de las venas
recordando a las madres y a las hijas...
dónde habrán comenzado estos andares
de qué tribus qué tierritas desde cuándo
paso a paso llegamos y partimos
pa regar la vida que nos dieron
pa abonar la pacha generosa
caminando ya seguras y felices
diciendo sí
a todo
lo que empieza
C.
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