miércoles, 29 de enero de 2025

Te deseo

apenas una flor en la llovizna
un pocito hecho de gotas en la calle de tierra
un olor verde y húmedo
despertando la mañana como pájaro
para que salgas al día en manos del amor 
y acerques a sus aguas las manchas que lavar
sostenido en su livieza cristalina
confiando
cosa así mansita
delicada
rancho en la inmensidad del corazón

C.

miércoles, 15 de enero de 2025

cuando me casé
no se me ocurrió tirar el ramo
-no me interesaba la tradición-
y era un regalo precioso de mi hermana y mi cuñada
lo guardé para mí
lo tuve en agua
y le fui recortando los tallos para que viviera...
entonces estábamos en casa un año después
y ella seguía queriendo atrapar el ramo
así que a Ana se le ocurrió que le armáramos uno
con las florcitas del jardín y me invitó
pensé qué apropiado lo disponible
lavanda para calmar el corazón
santa lucía para limpiar la vista
para curar heridas la caléndula
y unas hojas verdes de gazania 
para que se enamore de sí
y resista en tiempos de lo escaso
Ana lo acomodó delicadamente
y lo ató con la cintita de un moño de regalo
mientras nuestros ojos sonreían
entonces creamos la escena
y las presentes se pusieron detrás
de compañía o de excusa
el ramito voló unos metros y cayó en sus manos
-cosa de plantas-
en las manos de ella
que lo quería
la única interesada

C.


lunes, 6 de enero de 2025

no me mató el revolver que pusieron aquella vez en mi cabeza
no me mató el aborto ni el covid
no me mató la violencia machista
no me mató el miedo
ni la tristeza
ni la imprudencia
ni la ansiedad
ni el desamor
ni siquiera la pulsión de muerte
actuó de manera eficaz
en un momento oportuno

estoy sana
mi llama se templa con los años
y sigue dando calor a mi camino 
no tengo método 
soy una manzana madurando en el árbol
conozco mi ciclo
no sus vicisitudes 
honro a mis muertos con recuerdos alegres
siento desbordante admiración por la vida

¿podría irme?
sí 
pero quisiera 
la gracia de enojarme un día más 
de recostarme a tu amparo
de deshacerme en la ternura de una voz pequeña
y criar sin saber cómo 
de acariciar los animales que frecuentan mi corazón 
y saber del río por su roce
y del cielo por la altura que no olvidaron los ojos
y quejarme del desorden 
y barrer la casa
y recoger higos o ciruelas o frutillas en el patio 
y tender la ropa y mi espíritu de la misma manera
a que escurra el agua que le sobra
en contacto con el aire y con el sol



C.


miércoles, 1 de enero de 2025

fue la vida arrinconandomé
con eso que es amor
y yo pensé injusticia
para que me quitara los escombros del cuello  
y me sentara al sol
a contemplar las cosas a mi alcance
con esa luz que acoge y alimenta
como diciendo algo

C.